Bienvenidos

Este blog trata sobre indumentaria valenciana. Analizamos piezas actuales y antiguas, desde el rigor histórico y la iconografía pictórica de diversos artistas valencianos.

También esperamos realizar entrevistas a distintas indumentaristas, artesanos, falleras y falleros que quieran colaborar con nosotros mostrándonos sus trajes.

domingo, 20 de noviembre de 2011

Mañana de otoño - La indumentaria

En este cuadro de bonita composición, destaca más el paisaje que los personajes que en el aparecen.
Vemos en la parte izquierda del cuadro un hombre montado en un caballo o mula. Lleva una camisa con chaleco oscuro y un saragüell, en las piernas luce unas medias de color azul intenso. En los pies calza unas alpargatas, observamos que lleva enrollada la manta en el cuello para abrigarse. En la cabeza utiliza un sombrero de copa baja o rodina.


En la parte derecha del cuadro aparece un grupo de personas tres mujeres y un hombre que caminan todos juntos. Por la indumentaria que llevan seguramente van o vienen de alguna ceremonia religiosa.


El hombre lleva una capa que cubre todo el cuerpo y no deja ver la ropa que lleva debajo, solo podemos ver que lleva unas medias también de color azul. Como calzado utiliza unas alpargatas o espardenyes. En la cabeza también lleva un sombrero de copa baja como el otro personaje, este tipo de sombreros como ya comentamos fue muy utilizado por todo tipo de hombres y condición social.


Las tres mujeres llevan faldas o guardapiés de colores llamativos, amarillo, azul y rojo. Como prenda de abrigo lucen unos mantones de Manila, de color ocre, negro y verde, con sus bordados y flecos característicos.

Cubriendo la cabeza las tres llevan una mantilla de media luna de color negro, típicas valencianas.

viernes, 4 de noviembre de 2011

José Mongrell: Mañana de otoño


José Mongrell Torrent
Mañana de otoño
1907 Óleo sobre lienzo 66 X 104 cm.
Colección particular.

EL AUTOR

Sobre Jose Mongrell ya publicamos una entrada hace algo más de un año. Para leerla puedes pinchar en el siguiente enlace:

http://floreal-indumentaria.blogspot.com/2010/08/jose-mongrell-anacreontica-el-saludo.html


LA OBRA

El cuadro representa a unos personajes costumbristas ataviados con diferentes piezas de la indumentaria tradicional valenciana paseando por la huerta. Como el título bien nos indica, la escena transcurre en una mañana de otoño y se advierte en el cromatismo y la luz de la obra el interés del autor por plasmar a modo de instantánea tan bello momento.

Con respecto a la composición de la obra, en primer lugar llama la atención la posición de los personajes dentro del formato. Por un lado, tenemos a un saragüell montado en un burro en la parte izquierda y por otro a un grupo de personajes algo más alejados en la parte derecha. La distribución no es simétrica. El burro se encuentra más hacia el centro, mientras que el grupo se desplaza hacia la izquierda, como queriendo salir del cuadro. Este hecho refuerza la idea de instantánea que hemos comentado anteriormente. Así pues, el autor busca romper el estatismo del paisaje horizontal por medio de la colocación de los personajes, la introducción de los árboles que funcionan como contrapeso y la creación de tensiones lineales que obedecen a la perspectiva cónica utilizada como sistema de representación. Hay una sensación de equilibrio dinámico.




Trazando las secciones áureas de los lados del cuadro (líneas amarillas) podemos apreciar como las horizontales coinciden con el horizonte y el punto más alto de las montañas. Por otro lado las verticales coinciden con la pata más adelantada del burro, así como por uno de los árboles. Parece que el autor ha utilizado estos elementos para organizar y distribuir el resto de pesos por la superficie pictórica.



En cuanto a las tensiones, se observa una serie de líneas de fuga (líneas magenta) que buscan un punto de fuga fuera del cuadro. Este punto de fuga podría coincidir con el lugar hacia el que se dirigen los personajes, pero el autor parece haber querido prescindir de él, otorgando mayor importancia al trayecto de los personajes. De nuevo, este hecho remite a la sensación de instantaneidad, la fugacidad de lo cotidiano y por supuesto, de movimiento.

La paleta cromática consigue plasmar muy bien la luz de una mañana otoñal. Por un lado, advertimos el uso de colores cálidos y fríos, con el fin de crear perspectiva atmosférica. A tal efecto, los elementos alejados de la obra, han sido coloreados en distintos matices de azules, violetas y verdes, mientras los elementos más próximos como los árboles, el suelo o las ropas de los personajes han sido pintados con colores cálidos y en algunos casos con tonos contrastantes blancos y negros con el fin de ganar un mayor peso compositivo. Sobre las montañas y algunos elementos arquitectónicos observamos ricos matices cromáticos de la luz matinal, que contribuyen a armonizar la imagen dotándola de una gran sensación de sosiego.