Bienvenidos

Este blog trata sobre indumentaria valenciana. Analizamos piezas actuales y antiguas, desde el rigor histórico y la iconografía pictórica de diversos artistas valencianos.

También esperamos realizar entrevistas a distintas indumentaristas, artesanos, falleras y falleros que quieran colaborar con nosotros mostrándonos sus trajes.

domingo, 29 de agosto de 2010

Anacreóntica (El saludo) - La indumentaria

En este cuadro vemos a tres trabajadores del campo, una mujer y dos hombres. Todos ellos llevan vestimentas sencillas para desempeñar de forma más cómoda sus tareas.

La mujer porta un cesto con uva y utiliza como prendas de vestir una camisa sencilla con las mangas por mitad del brazo, más estrechas y sin puntillas.
En la parte de abajo lleva un refajo, saya o vió de color verde. Estos tipos de falda podían utilizarse de forma interior o exterior. En este caso lleva encima otra falda que parece ser de color claro, aunque no se aprecia bien al llevarla recogida a la cintura. Esta forma de ponerse la falda era frecuente en las mujeres para realizar el trabajo del campo y el doméstico, así protegían la falda. De ese modo solo vemos la tela blanca que hace de forro y el ruedo de color rosa alrededor del borde de la falda a modo de protección y para darle vistosidad a la prenda.
Sobre la camisa lleva un pañuelo o mocador de pit estampado y haciendo cenefas en tonos azules y beiges. Parece que es un pañuelo de creación más reciente que llevaba estampación sobre algodón. Estos modelos eran más coloristas y prácticos, pero menos lujosos, ideales para ser llevados en el trabajo.

Como complementos vemos que luce unos pendientes de barquillos. También lleva las horquillas para sujetar los rodetes laterales, así como la aguja y pinchos en la parte de detrás del moño. En el cuadro no se aprecia que utilice peineta.

En los hombres observamos que llevan como prendas de vestir unas camisas amplias, prendas utilizadas por todos los hombres, en mejor o peor calidad. En la parte de abajo no se aprecia lo que llevan, aunque la prenda de vestir de los labradores solía ser el saragüell.

Vemos que los dos utilizan mantas. El chico joven lleva una manta más llamativa de color rojo y con dibujos formando rallas horizontales de mejor calidad que la del otro hombre. Las mantas tenían varias utilidades, entre ellas podía llevarse como prenda de abrigo, llevarlas como adorno para acompañar el traje, como alfombra al poder dormir sobre ella, etc.
El hombre mayor lleva una manta de trabajo sobre el hombro. Esta tenía la misma estructura que la anterior pero sin ornamentos y los tejidos eran más bastos y fuertes.

Los dos lucen pañuelos estampados en la cabeza, anudados a la parte de detrás de la forma conocida como De cua o de tres, pero cada uno de diferente manera. El hombre mayor además lleva encima del pañuelo un sombrero tipo gacho, que era de tejido blando y solía ser utilizado por los labradores.

lunes, 23 de agosto de 2010

José Mongrell: Anacreóntica (El Saludo)


ANACREÓNTICA ( EL SALUDO)
1909
Óleo sobre lienzo 89x118 cm.
Propiedad de Bancaja.


EL AUTOR

José Mongrell Torrent. (Valencia, 3 de agosto de 1870 – Barcelona, 5 de noviembre de 1937)

Pintor, escultor, muralista y cartelista. En la Escuela de Bellas Artes de San Carlos recibió las enseñanzas de Ignazo Pinazo, trabajando posteriormente con Joaquín Sorolla. Su participación en diversos concursos y exposiciones en Madrid y Barcelona, le supuso cierto renombre entre los círculos artísticos. Hizo el cartel de toros para la Feria de San Jaime de Valencia el año 1897, con gran éxito.Instaló su taller en la plaza Mossén Sorell de Valencia, hasta que decidió establecerse en Cullera, donde permaneció seis años, hasta que obtuvo la cátedra en la Escuela de Bellas Artes de San Jorge de Barcelona, viviendo allí hasta su muerte en 1937.

En esta ciudad realizó importantes trabajos, como el mural del Salón de Recepciones de la Generalitat de Barcelona, una obra de grandes dimensiones, por encargo del presidente de la Diputación de Barcelona, el conde del Montseny, representando la Virgen de Montserrat con santos y reyes rindiéndole culto. También realizó retratos de distinguidas personalidades de la época como Alfonso XIII o el doctor Olivé.

Fue en su obra cartelística donde desarrolló sus conocimientos del colorido y del mensaje publicitario; de hecho su cartel de la Feria de Julio de 1912 fue elegido para reeditarlo en 1971 con ocasión del centenario de estas fiestas. También realizó diversos trabajos para la litografía Ortega, entre ellos varios carteles taurinos.

La vibración de la materia la transmitió con los mosaicos modernistas del gran arco del Mercado de Colón y de la fachada de la Estación del Norte. Sabía captar el instante, haciendo que sus escenas costumbristas adquirieran vibración y cobraran vida. Entre sus cuadros destacan Mosqueteros jugando al ajedrez, Primavera o Desde mi estudio, participando con ellos en diversas muestras nacionales e internacionales.

LA OBRA

El cuadro del que nos ocupamos en esta ocasión, nos muestra una escena costumbrista muy al estilo de Sorolla. Podemos apreciar la imagen de una valenciana sosteniendo una cesta de uva mientras un anciano le ofrece un vaso de vino y un joven sentado parece lanzarle algún tipo de piropo o saludo.

La composición del cuadro se divide en dos grandes bloques justo por la mitad. A la izquierda tenemos la valenciana que permanece de espaldas a los hombres con la cabeza girada hacia ellos en actitud coqueta. Mientras, en la parte derecha se encuentran los dos hombres: el joven en primer término y el anciano tras él. Ambos dirigen la mirada hacia la joven. El juego de miradas provoca un recorrido visual por toda la obra, en especial en la parte superior, donde la vibración de la materia y la audacia de las pinceladas cobran un especial protagonismo.

La parte superior de la joven así como el cesto, funcionan como elemento jerarquizador de toda la obra. De este modo, podemos encontrar varios elementos que sugieren líneas direccionales hacia dicha zona, como por ejemplo la pata de la mesa, el mástil de la guitarra, el brazo del anciano sosteniendo el vaso, etc.


En cuanto a la paleta cromática, toda la obra rezuma calidez, únicamente quebrantada como contrapunto por los azules del fondo y los verdes de la vegetación y de la falda de la joven. Destaca especialmente el tratamiento del color en las telas blancas, donde podemos apreciar una infinidad de matices cromáticos que contribuyen a crear esa atmósfera tan particular de la luz de Valencia.

martes, 10 de agosto de 2010

El Brocatel

El brocatel es un tejido de seda elaborado en telar de madera de lisos y jacquard. Está formado por dos urdimbres de un color y dos tramas de colores diversos.

Este tipo de telas se teje con metales de plata y oro, produciendo mayor realce en los dibujos. La decoración es más recargada y los motivos ocupan la mayor parte de la superficie. Generalmente el fondo del tejido es de raso y del color del hilo de la urdimbre.


En la Edad Media la seda era una de las materias primas principales. Pero poco a poco se produce su progresiva sustitución en la urdimbre por algodón o cáñamo por ser ésta un elemento no visible y que abarata el coste.

Antiguamente el uso de metales nobles en las tramas de tejidos estaba muy generalizado incrementándose las variaciones, creando tramas y bordados con metales. Todo ello fue posible gracias a la fabricación de la máquina Jacquard, que como ya comentamos anteriormente permitía realizar dibujos muy elaborados con facilidad.
El brocatel de la foto es de Sedica y nos lo ha facilitado Adelaida de Monmeneu Indumentaria Valenciana dejándonos fotografiar sus tejidos.

martes, 3 de agosto de 2010

La Chupa o Jupa



Pieza de vestir de hombre, que se llevaba en los S.XVIII y XIX. Cubría desde el cuello hasta la cintura o un poco mas abajo.
Va encima del jupetí (chaleco), es de caracteristicas similares, pero con mangas.

Los tejidos usados en su confección son: lana, seda y algodón, con ligamentos de seda, terciopelo, etc. Siempre en colores lisos y oscuros, como el marrón o colores terrosos y el negro como color mas común y único hasta finales de los S:XIX e inicios del XX.

Era una pieza independiente del calçó o saragüell, aunque en ocasiones especiales, solian confeccionarse conjuntos completos del calço i jupa, del mismo tejido y color.

Las mangas quedan caídas del hombro, son estrechas y con forma que acaban a la altura de la mano. Pueden acabar despegadas en forma de hacha, adornadas, con puños postizos o girados, pestañas, botones o mançanetes... Podían darse casos en que las mangas estuviesen sueltas, despegadas de las sisas a las que se fijaban por medio de cordones o incluso de botones o cintas.

En caso de llevar cuello, es una tira de unos 5 cm. de alto, ornamentada o no, con repuntes formando dibujos geometricos. La solapa puede ser triangular tipo militar o mas evolucionada de forma rectangular que llega a la cintura y sujeta por 4 o 5 botones. Las mas lujosas se adornan con ribetes de trencillas, pasamanería, cordones o borlas.

No era común llevarla abrochada, pero así y todo llevaban botones y ojales o botones solos sin ojales, mançanetes o pasadores hechos con galón. En épocas mas calurosas, se llevaban al hombro, dejando ver el jupetí.

Aunque parezca una pieza de vestir, es posible que las mas deterioradas se usarán como pieza de diario o trabajo.

El forro en las antiguas era de lienzo blanco y posteriormente de algodón.

A finales del S.XIX aparecen piezas con bolsillos y la incorporación del pantalón largo, convive un corto periodo de transición hasta que definitivamente en el S.XX es sustituida por la brusa o la jaqueta, como pieza de vestir.